Perdida olímpica en Miraflores

¿¿¿¿¿Por qué?????

Digo, no?, ¿cuándo voy a aprender a guiarme por Lima? Hoy fui al parque Kennedy después de clases, para tomar unas fotos que me faltan para el trabajo que les comenté. Bah, de nada sirvió, había demasiaaaada gente y era imposible tomar una buena foto. Se me ocurrió ir a Larcomar, total, estaba a un paso. Iba caminando yo, terminando el parque, y no sé por qué miércoles me metí por la Bajada Balta, seguí caminando, pasé un campo de tenis... seguí caminando... ya no había autos a la vista... seguí caminando... ahorita llego, ahorita llego, pensaba. Pasé por un faro, un puente... ya ni gente había... Dios, ¿dónde me he metido?, ahorita llego, ahorita veo las fuentes... Caminé dos horas. Así es. ¡¡¡DOS INTERMINABLES HORAS!!! Mis pies me mataban, ¿por qué no fui por el camino de siempre?, ¿en qué estaba pensando cuando fui por ahí? Sí... ya recuerdo, me llamaron al celular, y caminé sin pensar. Ya casi eran las 9 y vi varios carros venir del mismo origen: ¡Debía haber una avenida por ahí! Aceleré el paso y llegué a una. ¿Problema?... no tenía idea de cuál era. Leí el cartelito. Estaba en Pardo. Más rápido que flash fui al paradero más cercano, qué miércoles, agarraría el primer micro que se me cruzara, sólo quería salir de allí. Y como intervención divina: La S. ¡¡¡Ese micro pasa por mi casaaaaaaaaaa!!! Lo llamé, subí y jato hasta llegar a mi casa.

En conclusión, no tomé ni una mísera foto, caminé horas y los pies me matan, llegué en plena lluvia a mi casa... ¿Algo bueno? Al menos hice ejercicio...