Estoy en la edad en la que los mejores amigos se van de viaje

Así es. Ya me enteré de que una de mis mejores amigas se va a estudiar a Piura, y también que otra probablemente repita la historia.

Ayer terminé con las compras que había programado hace días en mi agenda. Temprano entré al msn y le mandé un sms a una amiga para que entre, quería saber si me podía acompañar a hacer las compras. Dijo que sí. Así que a las cuatro de la tarde nos encontramos en la puerta del Primavera Park & Plaza para ir caminando a Plaza Vea y a Polvos Rosados, allí compraría todo lo necesario.

Llegamos a Plaza Vea mientras yo le contaba todo lo que me había pasado en estos últimos días, pues llevábamos tiempo sin vernos y tenía que actualizarla. Estaba escogiendo entre los pioners que había en el estante cuando me dijo sobre una reunión con la gente del colegio este viernes en la casa de otra amiga.

- ¿Ah sí? Ya pues, yo voy. Pero iré tarde, porque ese día tengo ensayo.
- Con tal que vayas está bien, porque habrá sorpresas ese día.
- ¿Sorpresas?, ¡¡dime!! jajaja
- Ah no, tienes que ir para que sepas

Me dejó con la duda, y luego para cambiar de tema...

- ¿Y qué fue?, ¿dónde vas a estudiar?
- Eh...
- Porque tienes que decidirte. Ya debes saber a qué universidad...

Y me puso cara de "¡que no pregunte, que no pregunte!"

- ¡Mierda!, ¿te vas a Piura?

Mi amiga llevaba tiempo con esa inquietud, y parecía, por su cara, que ya había tomado una decisión. Estudiar en Piura era más barato, cómodo y tenía familia allí. Por otro lado, la iba a extrañar un montón.

El paseo se volvió incómodo por un rato. No soy de las personas que te andan abrazando y dando besitos, no expreso muy seguido mis sentimientos. Suelo ser muy fría. Pero una de mis mejores amigas, una de las más antiguas, por así decirlo, se iba de viaje... y quién sabe por cuánto tiempo.

Le invité una raspadilla, terminamos las compras y fuimos a su casa para ver una película (la que nunca vimos, pues nos quedamos en msn). Pasaron las horas y le dije que me iba a casa antes de que los micros pasen reventando. Y así fue. Me fui. Sin decirle nada más, cuando lo único que quería era abrazarla y decirle cuánto la iba a extrañar. Al menos tengo hasta el viernes para prepararme... ayer me agarró fría...