El enigmático pensamiento de Maquiavelo

Si aún están en el colegio probablemente hayan escuchado su nombre, pero con una descripción muy vaga. En una clase de la Universidad asignaron una lectura sobre el pensamiento político de Nicolás Maquiavelo, un político florentino cuyas dos principales obras son tan contradictorias que nadie sabe a qué se quizo referir realmente, ni podemos estar seguros de la verdadera postura que tenía frente al tema del Estado.

Para comenzar, el vivió en el tiempo de los Médici, de quienes ya hablé en un post anterior. Pero de ellos volveré a hablar más adelante.

Sus dos obras maestras: Discursos sobre la primera década de Tito Livio y El Príncipe. En la primera él se confiesa un hombre de pensamiento republicano, partiendo de que
la comunidad tiene dos "espíritus": el pueblo y los grandes (los que quieren gobernar), que están en constante conflicto. Maquiavelo considera a la República como el mejor sistema para el Estado, dice que es la mejor forma de mantener una nación organizada, pues participan los dos partidos de la comunidad. Ni siquiera piensa en la aristocracia, la monarquía, la tiranía o la democracia como sistemas factibles, solo plantea que la idea de un gobierno republicano es la mejor.

Sin embargo, una oposición total a lo que planteó en Discursos es lo que establece en El Príncipe. En esta segunda obra que menciono él afirma que el mejor sistema es el democrático. Aunque debemos tener en cuenta (aquí vienen los Médici) que Maquiavelo escribe esta obra para enseñarle a Lorenzo de Médici a gobernar Italia, unificándola.

Aun con todas las contradicciones de sus dos obras, podemos distinguir que Maquiavelo las escribió con un solo fin, un solo objetivo: formar un Estado moderno en la Italia de su tiempo.

Estatua de Maquiavelo en la Galería Uffizi